Almojábanas y mantequilla de hoja de coca: estos empresarios encontraron una alternativa de negocio

Mónica Ríos, de la escuela de cocina Gato Dumas, estudia el uso de la planta en la gastronomía.

“Lo que quisimos fue entender qué hay detrás o qué es la coca como tal y enseñarle a las personas que en definitiva la coca no es cocaína. Además, desarrollar productos gastronómicos para contar otra historia a partir de la coca”, dijo Ríos.

El laboratorio que dirige Mónica Ríos se encarga de investigar, encontrar oportunidades y conectar personas que se interesen este tipo de productos.

“Nutricionalmente aporta calcio, potasio, proteínas, minerales, hierro, muchísimos nutrientes son los que tiene la hoja de coca”, aseguró la empresaria, quien quiere que se cambie la percepción sobre el uso de la planta.

Mónica Ríos prepara almojábanas y mantequilla de hoja de coca. En sus recetas utiliza harina de la planta, que es el resultado de tomar hojas enteras, secarlas, tostarlas, molerlas y pasarlas por un tamiz.